Esta semana he conocido muchas fechas clave en lo que me queda de tiempo en Japón.
Por ejemplo, el 25 de este mes tengo que entregar una especia de abstract (anteproyecto) de mi investigación de 2 páginas. Un par de semanas más tarde me dicen si está bien o no, y normalmente no ponen problemas salvo que de verdad lo hayas hecho tan mal que tengas que repetir curso, porque luego ya casi no da tiempo a nada. Eso sÃ, dan recomendaciones para encaminar y rematar las últimas semanas de investigación.
A finales de enero tengo que presentar la segunda versión del anteproyecto, considerando las recomendaciones propuestas. Y a comienzos de febrero, el 8 y 9, son las presentaciones de fin de Master. Nos encierran a todos los M2 en un aula y uno a uno vamos presentando en estrictos slots de tiempo: 12 minutos para la presentación y 8 minutos para preguntas. Parece poco tiempo, y ese es el problema, conseguir hacer algo decente, con sentido y a ser posible entretenido que condense dos años de trabajo aquÃ. Los resultados se saben pronto, al dÃa siguiente de haber hecho la presentación. Obviamente lo normal es que llegado a este punto no te echen para atrás porque antes no te hubieran dejado presentarte, pero quién sabe…
La presentación de la Master Thesis aún no se sabe cuándo es, pero me han comentado que será o antes o después de las presentaciones. Asà que a quedarse con la duda hasta que salga la información a lo largo de este mes.
Por último, la graduación oficial (con entrega de diplomas y todo) es en la época de florecimiento de los cerezos, el 29 de marzo.  Y mi vuelo de vuelta será después de esa fecha y antes de que comience abril, asà que poco margen queda. Aún no sé la aerolÃnea ni dónde haré escala, pero todo apunta a que será con ANA ó JAL parando en centroeuropa, ya veremos, será lo que el gobierno de Japón decida, que son los que pagan.
Pero bueno, hasta que eso llegue aún quedan muchos otros dÃas para seguir disfrutando de Japón, y de Asia.