Entradas escritas en febrero de 2009 ↓

Crash (o chof)

La tasa de accidentes de aviación comercial durante el año 2008 medida en número de aparatos perdidos es de 1 por cada 1.2 millones de vuelos. Es decir, estadísticamente habría que hacer un vuelo de ida y vuelta diario durante más de 1600 años para que te acabara tocando en un avión que al final del vuelo quedara inutilizado, y aún así existirían posibilidades de supervivencia.

El dato del párrafo anterior representa la media mundial. Comparando por regiones, respecto a Europa, Asia y Norteamérica que tienen 1 accidente por cada 1.8 millones de vuelos, en África es tres veces superior. Y cinco veces superior en Sudamérica.   

Un 33% de los accidentes anteriores fueron durante el despegue o el aterrizaje, y un 17% estando en tierra. Es decir, en el aire sólo ocurren la mitad de los accidentes, a pesar de ser la etapa más larga del vuelo (aunque luego, al final, todos acaben en tierra/mar/río).

El año pasado, las víctimas mundiales a bordo de aviones construidos en occidente (Boeing, Airbus, etc, no los rusos Illyusin, Tupolev, etc) sumaron 502. Dá mucho que pensar acerca de la seguridad de la aviación si lo comparamos con las 2181 víctimas tan sólo en las carreteras españolas durante el mismo período de tiempo. 

Fuente: lista de correo Aerolínea.

Lección de geografía

¡Ay esas clases de geografía!

Qué útiles que son cuando tienes que enseñarle cómo es España a gente de fuera. El siguiente mapa es una muestra de lo que da de sí media hora de parloteo y dibujo. No revelaré la autoria, sólo diré que la imagen siguiente es un poco de tinta de Pilot G-TEC-C4 sobre una libreta Moleskine. Y yo no soy, porque aunque tengo esos dos elementos no soy zurdo :P.

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El Sol está subiendo.

 

Actualización desde casa: lo siento por el rollo que os voy a meter, pero el aburrimiento y la emoción me hicieron escribir lo siguiente en caliente (aunque a unos centímetros a mi izquierda el aire estuviera a -70ºC).

 

Los aviones siguen en sus rutas los círculos máximos, es por ello que para ir de Tokyo a Moscú hemos pasado por el norte de Siberia, aún cuando ninguna de las dos ciudades está a tan altas latitudes. Y esto tiene efectos muy curiosos. 

Durante la primera mitad del viaje, como íbamos hacia el Norte y ahora es invierno, nos acercábamos hacia donde las horas de luz diurna son menores, cuanto más al norte antes anochece en invierno, así que, en cierto modo, estábamos dándole al sol ventaja, dejándole que nos adelantara y cayera bajo el horizonte, y así pasó. Cierto es que en la ruta Tokyo-Moscú no tiene por qué llegar muy arriba, pero como es Aeroflot, la aerolínea de bandera de Rusia, pues decidió pasar de Japón por Vladivostok, y luego esquivar China y Mongolia dirigiéndose muy hacia el norte, para volar en territorio nacional durante todo el tiempo (es más cómodo para ellos porque así pueden hablar con los controladores en ruso).

Después, cuando llevábamos dos terceras partes del vuelo, una vez llegado al punto más al Norte que alcanzamos en Siberia, a unos 70º latitud Norte, el círculo máximo nos llevó de nuevo a bajar hacia latitudes más bajas. Y bajando de esa forma nos acercamos a donde los días no son tan cortos en invierno, echamos una carrera contra el Sol. El Sol se esconde, pero nosotros vamos hacia donde el sol tarda más en esconderse. Si a eso le sumas que en estas latitudes la velocidad lineal de rotación de la tierra es comparable a la velocidad lineal del avión (vamos a 850kph ≈ 230 m/s, y la tierra a 70º de latitud norte gira a cos(2*pi/360*70)*(2*pi*6300*1000/24/60/60) ≈ 160 m/s), pues resulta que estamos yendo más rápidos que la tierra.

¿Y qué ocurre cuando vas más rápido que la tierra?, pues lo sabemos bien por la primera película de Supermán… bueno…  esto es muy discutible, pero vamos, que se sabe que cuando vas más rápido que la tierra es como si el tiempo fuera hacia atrás, y eso es lo que estoy viendo ahora mismo. Es increíble. Estoy viendo cómo el Sol que hace unas horas se había escondido ahora está subiendo por el horizonte. Es algo que nunca había visto antes, y me encanta. Es un amanecer por el oeste, a las 5 de la tarde.

Ahora más que nunca me alegro enormemente de haber venido con Aeroflot, ya os contaré qué tal el resto del viaje (muy bien), pero sólo por este detalle le estoy muy agradecido a los rusos.

¡Спасибо Аэрофлот!

Voy a nadar entre las nubes

Aeroflot me acerca a España. Ya. Mañana a Suecia. La semana que viene a Alemania. La siguiente a Francia. Una más y a Palma de Mallorca. Y después… tocará volver.

Desde Narita

Qué buena es la Wifi de la sala business de United que se pilla desde la puerta 27 de la Terminal 2 :D

    

Como sabéis, me gusta refrescarme, se nota que acabo de hacerlo.

La gente ya está embarcando en el vuelo SU576 de Aeroflot hacia Moscú/París. En Moscú me bajo tras 10.5 horas de vuelo, y tomo el vuelo SU299 hacia Madrid, 5.5 horas más… y habré llegado.

Me voy, que no quiero perderlo. 

Hasta pronto!

Cosas que no entiendo

Tanto en la universidad como en mi dormitorio no se estila la calefacción. Hay un aparato que hace las veces de aire acondicionado o bomba de calor según corresponda. Ya os he contado qué pasa con ese aparato en mi casa, cómo no se consigue del todo una temperatura agradable, aunque poco a poco le voy pillando.

El caso es que a mi me gusta estar en manga corta por comodidad, mas que nada porque no tengo demasiadas camisetas de manga larga y eso de estudiar con capas me resulta incómodo. Pero bueno, asumo que en ciertos lugares hay que estar con el jersey en invierno.

Pero en la Student’s Room ocurre algo extraño. El termostato está puesto a 22º. Una temperatura muy adecuada para el invierno. Pero no sé qué les pasa a la mayoría de los japoneses que les gusta estar abrigados. Como lo leéis. Con abrigo, bufanda y gorro en el laboratorio. Y claro, entonces 22º les parece calor y abren la ventana. Y yo llego y me encuentro con la bomba de calor a todo trapo, la ventana abierta, y un par de japoneses tecleando en el ordenador bien abrigaditos. A esta contradicción se suma otra, que cuando pillan un resfriado bien rápido que se ponen la mascarilla para no contagiar a los demás, para prevenirlo podrían al menos preguntar antes de abrir la ventana…

Aparte del derroche energético que supone, está el punto de que no es nada cómodo (= improductivo) trabajar con abrigo, y que las manos se me empiezan a quedar frías por debajo de unos 20º de temperatura ambiente si estoy tecleando o escribiendo. 

Otra cosa que no entiendo es cierta persona que se queda a dormir en el laboratorio (tenemos un sillón bastante cómodo) para aprovechar el tiempo porque vive a casi 1h de la universidad, y a la mañana siguiente cuando yo llego le pregunto qué tal y demás, y me contesta que está cansado, que se va a desayunar, ¡¡a su casa!!. 

Cosas como esta descolocan bastante y en el fondo ves cómo la mentalidad japonesa supone una barrera tan difícil de vencer como el idioma.

Cuervo espantapájaros

Me gustan los cuervos. Pero a veces no se comportan del todo bien con otros pajaritos. Quizá por ello en Japón un espantapájaros hecho con una botella y una bolsa negra de basura resulta efectivo. 

Espanta cuervosÂ