Tanabata, la fiesta japonesa que se celebra en el séptimo dÃa del séptimo mes. Pero esto es un poco ambiguo, porque podemos referirnos al mes solar o al lunar. El primero depende del movimiento de traslación de la Tierra alrededor del sol y coincide con el calendario que usamos, no tiene mayor complicación.
El segundo el calendario Lunar, como su nombre indica es en función de la luna, y puede comenzarse a partir de alguna fecha del calendario solar como hacen los chinos que hacen coincidir su año nuevo con la segunda luna nueva después del solsticio de invierno, por eso varÃa año tras año. Los cristianos proceden de forma parecida con la Semana Santa que depende de la fase de la luna durante el equinocio de primavera. Aunque esto en realidad se llama calendario lunisolar, con la peculiaridad de que este tipo de calendarios tiene cada 19 años un mes extra. Por si fuera poco jaleo, los cristianos ortodoxos del este de Europa siguen el calendario lunisolar juliano, que tiene un desajuste de tres dÃas por cada cuatro siglos, asà que desde el comienzo de los tiempos (año 0) ya llevan un par de semanas de retraso y por ello celebran su Navidad el dÃa 7 de enero.
Los que sà que siguen un calendario lunar propiamente dicho son los musulmanes, algo que les produce que su mes santo, el Ramadán, se desplace año tras año. Aún me acuerdo del Ramadán que pasé a finales de septiembre en Marruecos hace tres años. Y como se desplaza poco a poco, el año que viene cae enterito dentro de agosto, lo que no les viene nada bien a los seguidores del Islam ya que hay más horas de luz y por tanto tienen que mantener el ayuno durante más tiempo. Otra cosa curiosa es que el Ramadán se acaba cuando al atardecer del 29º ó 30º dÃa se ve la Luna Nueva. Pero si ese dÃa está nublado o hay tifón (como pasó aquà este año), pueden fiarse de la palabra de una persona que haya visto la luna nueva en un radio de distancia suficiente como par recorrido durante la noche. Aquà calculan 100-200km.
Y esto último es curioso porque indica que el calendario musulmán es local, es decir, depende del lugar de observación en el que te encuentres, al igual que sus horas de oración que dependen del amanecer y anochecer locales. Digamos que motiva el aprendizaje de la astronomÃa. Otros calendarios dependen de la observación en un meridiano concreto, lo que produce por ejemplo que los calendarios tradicionales chinos y japoneses que suelen ir en fase a veces tengan un dÃa de diferencia porque la primera luna nueva cae en China en determinado dÃa y en Japón ya en el dÃa siguiente.
Bueno, y todo esto ha sido un poco improvisado, porque iba a hablar del Tanabata, la fiesta en que los japoneses piden deseos (habilidades) para conseguir sus metas, originaria en una leyenda en que un par de enamorados quedaron separados por no haber hecho sus respectivas tareas. Perdón por resumirlo, pero la versión larga está muy bien explicada en la entrada de Tanabata en la Wikipedia, no es plan de fusilarla.
La historia de los calendarios venÃa porque en cada ciudad de Japón celebran el Tanabata en una fecha distinta, de forma que en cualquier momento durante el verano te puedes encontrar una celebración por la ciudad en que estés. Eso es lo que me ocurrió en Nagoya, que sin quererlo me encontré con una calle cubierta repleta de adornos y de ese ambiente tan tÃpico de los festivales japoneses.
Reconozco que me ha quedado un post un poco raro. Pero bueno, en este blog no hay normas más que las que yo me imponga. Y no veo por ningún lado una cláusula que me impida hacer experimentos o comportarme de forma impredecible. Como los adornos del Tanabata.