10 dÃas sin escribir, y eso que a ratos me daban unas ganas terribles de hacerlo. Pero cuando tenÃa el ordenador a mano me faltaba tiempo (cosas de estar a fin de curso), y cuando tenÃa tiempo el ordenador estaba a cientos de kilómetros de distancia (cosas de recibir visitas). A ver si me pongo un poco al dÃa con las fotos de Corea. Después vendrán las de estos dÃas atrás, aunque podéis ver un avance por aquÃ.
De momento, unas pocas más de Corea. Perdonad si va alguna repetida, las anteriores las subà directamente al blog, y estas van vÃa Flickr estrenando cuenta Pro :). Pues eso:
Estos niños jugueteaban y hacÃan equilibrios en el tren. Pedà permiso a la madre para hacerles una foto. Pero no era la única madre y casi me llevo una regañina yo.
En la pantalla se emiten fotos de una cámara situada en otra parte de la ciudad, donde los curiosos acercan sus narices. Aunque da igual, nadie está pendiente de lo que pasa al otro lado.
Los correos electrónicos no necesitan sellos.
Curioso dulce, conseguido después de apilar finÃsimsa capas y capas de caramelo con almendras.
En Corea no hay papeleras. Ni siquiera en los convinis. Y los coreanos son un poco más guarros que los japoneses. No es que anden tirando la basura en mitad de la calle, pero si no hay papeleras… las improvisan.
Esas deliciosas algas kim, con un poco de aceite de sésamo y sal están para chuparse los dedos.
