Entradas escritas en junio de 2010 ↓

Tokyo Mita Club

En Japón hay muchas cientos de universidades. Este hecho no es porque el país tenga mucha población joven precisamente, sino por la titulitis y porque hoy en día llaman universidad a cualquier centro de estudios superiores. De hecho la palabra “universidad” en japonés significa eso mismo, gran escuela (大学, daigaku).

Pero bueno, la Universidad de Keio en la que estudio es una universidad de verdad, y además la más antigua de Japón. Tiene mucha fama y de ella ha salido gente que han llegado a ocupar altos cargos del gobierno y de las grandes empresas de Japón.

Hhay una asociación de antiguos alumnos para mantener el contacto después de graduarse, que se llama Mita Kai ( 連合三田会 ). Pero también hay otra asociación de mucho mayor nivel para mantener los contactos. Se llama Tokyo Mita Club ( 東京三田倶楽部 ), y es un prestigioso grupo que, según me han contado, tiene cierta influencia en las empresas y en el gobierno japoneses. No sé hasta qué punto llegará esta influencia, pero sí os puedo decir que disponen de un salón de eventos privado y de uso exclusivo en el Hotel Imperial, uno de los mejores hoteles de Tokyo. Solo digo que es el lugar donde se alojó el Rey de España cuando vino a Japón.

Y ayer estuve por ese salón, celebrando el aniversario de la fundación del Tokyo Mita Club. Invitaron a gente de todos los estratos de la universidad, desde directores de escuela y gente importante pero desconocida para mi, hasta alumnos internacionales. Me enteré gracias a FangFang, que es muy espabilada para estas cosas y nos avisó a Pierre y a mi.

Tokyo Mita Club

Tokyo Mita Club

Tokyo Mita Club

Una vez allí, hubo charlas de diversas personalidades, y tras un ¡campai! comenzó la reunión, a veces hablando con unos y otras veces con otros, el idioma no era problema, manejaban muy bien el inglés. Todo esto acompañado con una comida deliciosa.

Tokyo Mita Club

Hubo también las obligadas fotografías de grupo a cargo de los dos fotógrafos profesionales que habían contratado. Yo debo aparecer por alguna de ellas, aunque no en la siguiente que esa la saqué con mi cámara.

Tokyo Mita Club

Al final, se sortearon unas carpetas y emblemas del club. El sorteo fue a piedra papel o tijera (¡!), y como es un juego que no se me dá nada bien, no gané nada. Pero bueno, a la salida todos nos llevamos nuestro recuerdo, muy curioso por cierto: una cucharilla y un dorayaki con el logo del club.

Dorayaki de Tokyo Mita Club

(el dorayaki, buenísimo. Ahora mismo estoy digiriéndolo)

Acabó en hora, como estaba previsto, justo antes de que comenzase el partido del mundial Japón-Holanda. A la vuelta en el tren pude ver como todos los japoneses iban ensimismados en su móvil viendo el fútbol en directo, gracias a que la mayoría de terminales llevan integrado un sintonizador de One Seg, una especie de televisión digital para dispositivos portátiles.

Fútbol en el móvil

Policías de la vieja escuela

Japón es un país relativamente seguro, ahora mismo no recuerdo ningún rincón por el que dé miedo pasear a altas horas de la noche o por ejemplo con una cámara de fotos en la mano. Muchas veces la policía parece de juguete, te saludan, controlan un poco el tráfico, y poco más. A veces cuando les llega una situación un poco más seria no saben bien lo que hacer y se quedan bloqueados. Pero bueno, ayudan en lo que pueden.

Otro hecho de Japón es que su población decrece y envejece. Es normal ver a obreros ya bien metidos en sus 40 y pico o 50 y pico años, guardias de seguridad de esa misma edad, o incluso policías vigilando algo importante. Os dejo un par de fotos de estos policías de la vieja escuela:

Policía de la vieja escuela

Policía de la vieja escuela

Policía de la vieja escuela

Un paseo por USA

Creo que aún no os lo he contado, pero hace unos días estuve dándome una vuelta conociendo cómo es Estados Unidos. Fue algo rápido, unas pocas horas, lo suficiente como para hacerse una idea general. Y esto es lo que vi:

Okinawa is not America

(drive thru, en Japón nadie lo echa en falta, otra cosa es si fuera train thru)

Okinawa is not America

(outlets y grandes superficies por todas partes)

Okinawa is not America

(una zona militar, ojo con intentar acercarse)

Okinawa is not America

(la gran empresa norteamericana, omnipresente)

Okinawa is not America

(más centros comerciales)

Pero como os dije, sólo fue un rato. Al día siguiente cogí el vuelo de vuelta hacia la capital de Japón. Y al llegar una vieja conocida me saludó con un Welcome Tokyo!

Estatua de la Libertad

Terremoto (XI)

Esta ha sido pequeñito. Muy pequeño. No me hubiera enterado si no llega a ser por que vivo en un piso 12 y el epicentro haya estado prácticamente debajo de mi casa. Ni siquiera he notado la vibración. Simplemente que, mientras desayunaba, absorto en mi taza de café y mis dos tostadas de pan con aceite (de oliva, por supuesto), he oído un “crack” generalizado, de esos que suenen cuando estás en una casa nueva. No le he dado mayor importancia hasta que unos minutos más tarde he ido a consultar la página de la Japan Meteorological Agency para ver si hoy iba a llover, y me he encontrado, aparte de mucha lluvia, con un pequeño temblor de 2.5 grados Ritcher justo en Yokohama, justo a la hora en que estaba desayunando.

Las fiestas de mi barrio japonés (y yo participando)

Veo que os gustó el primer post de las fiestas de mi barrio. Ahora este segundo post va a contener algunas fotos, algunos vídeos, pero no todos han sido tomados por mí. ¿El motivo?, pues que yo aparezco. Sólo os digo que el dolor de hombros me duró tres días.

Lo primero era prepararse, ponerse una prenda tipo yucata, una cinta para sujetarla en la cintura (o las caderas, dependiendo de cuál tienes más estrecha), y una especie de calcetines con suela cuya característica más notable es que son como manoplas: el dedo gordo va aparte. Unas señoras mayores de la zona nos ayudaron amablemente, no sin antes sorprenderse de la forma del cuerpo de los extranjeros, bien por la altura, el tamaño de los pies, o la proporción cadera/cintura que os comento (porque muchos de los japoneses que participan suelen tener barriguita).

Ushioda Jinja Matsuri

Ushioda Jinja Matsuri

Ushioda Jinja Matsuri

Y ahí estamos ya listos para cargar el Mkoshi por el barrio, para dar buena suerte a los vecinos durante el resto del año. Este templito portátil pesa mucho más de lo que podría parecer, más de 300 Kg, y suponiendo que se lleva a medias entre unas 30 personas, pues sale a 10kg por persona… ¡ja!, porque la distribución de pesos es muy muy irregular. Aquí en cuanto estés por encima de la media de altura te toca cargar con más peso en tus espaldas, y si estás por debajo, más que cargar cuelgas, por lo que añades peso. No sé cuánto acabaríamos llevando al final cada uno, pero de 10kg nada, bastante más.

Ushioda Jinja Matsuri

Ushioda Jinja Matsuri

Antes de empezar, se ponen todos los Mikoshis de las agrupaciones (supongo que será algo parecido a las hermandades en Sevilla) en el puente, y de ahí van saliendo por la calle Honcho abajo, luego se dispersan y cada uno va a su ritmo y eligiendo su camino por el barrio.

Ushioda Jinja Matsuri

Ushioda Jinja Matsuri

Ushioda Jinja Matsuri

De vez en cuando paran enfrente de algún local (residencia de ancianos, restaurante, tienda, etc) y se le hace algún movimiento especial. A cambio de esta especial bendición, el dueño del local entrega algo de dinero para el mantenimiento del Mikoshi.

Ushioda Jinja Matsuri

Aunque hay otros locales que en vez de dar dinero ofrecen un refrigerio a los costaleros. En este caso el supermercado Yokosan nos dio té fresquito, ¡gracias!

Ushioda Jinja Matsuri

Al final, cuando ya cae el sol, se hace una ceremonia en la que se comparte una bebida (supongo que será o bien sake o algún tipo de caldo) de una marmita común, que se va bebiendo uno a uno en un vaso-caja cuadrada por una de las esquinas. Lo vi desde lejos, así que no tengo fotos. Después, dependiendo de la cofradía, la gente puede reunirse a cenar, quedarse en un parque hablando, o dispersarse cada uno a sus casas. Normal después del cansancio. Aunque hay algunos que se cansan sin ni siquiera haber empezado:

Ushioda Jinja Matsuri

(tomada antes de empezar la procesión)

Y poco más que decir, salvo que una experiencia así merece la pena por conocerlo, aunque no lo volvería a repetir, creo que es hacerse daño y participar en un juego de masas que no tiene demasiado sentido más allá de la tradición. Aunque verlo desde fuera, ¡sin problemas!

Ushioda Jinja Matsuri

Mikoshi desde arriba

Matsuri

Mikoshi desde arriba

Terremoto (X)

Este ha sido moderado. 6.2 grados Ritcher, a unos 200km al norte de Tokyo. Los de Sendai se tienen que haber metido debajo de sus mesas, el Shinkansen seguro que ha recibido la orden automática de pararse, y ahora a esperar réplicas. Medido en la escala japonesa, en la zona más cercana al epicentro se ha medido con magnitud 5 (el máximo es 7). Para haceros una idea cómo es esta escala, las magnitudes 1, 2 y 3 es que notas el terremoto, pero no te asustas. En una zona con magnitud 4 y 5 el miedo te recorre el cuerpo y se toman medidas de precaución. En las magnitudes 6 y 7 ya hay daños importantes e incluso muertes debidas directamente al terremoto.

¿Y cómo lo he notado en Yokohama?, pues en mi habitación no ha pasado de ser una oscilación de unos 0.5s de período (debe ser la frecuencia propia de mi edificio), pero durante mucho tiempo. Si normalmente todo pasa en menos de 5 segundos, esta vez ha superado ampliamente el medio minuto de duración. Me ha dado tiempo a enterarme plenamente de lo que estaba ocurriendo, ser consciente de que no era un terremoto normal, y pensar en si ponerme los zapatos con o sin calcetines en caso de tener que salir corriendo de casa.

Pero antes que todo eso, también me ha dado tiempo a activar el sismógrafo de mi portátil. Es un pequeño programita (SeisMac) que usa los acelerómetros que protegen al disco duro (su función habitual es desactivarlo si detectan una caída) para darte información del movimiento del equipo. Y aquí está la imagen del mismo:

Las oscilaciones de 0.5s cuesta verlas en esta escala, pero sí que podéis observar muy claramente las trepidaciones en el eje Z. Una curiosidad, el desvío de 0.1G en el eje Y no es porque viva en un edificio inclinado o mi mesa cojee, sino porque  tengo al ordenador apoyado sobre una base con ventiladores que no es plana. En situaciones normales (edificio vertical, mesa estable) debería estar centrado en 0G.

Pues lo dicho, a esperar las réplicas, y a ver si alguna cae cerquita de Tokyo, porque como dice Dani, los terremotos son como las atracciones de las fiestas de verano en España pero gratis y sin salir de casa.

A380 de Lufthansa en Tokyo

Cuando se inaugura una ruta aérea, el aeropuerto de destino suele recibir al avión con un arco de agua. Así ha ocurrido esta mañana con el A380 de Lufthansa en Narita, y aunque se inauguraba ninguna ruta, lo merece el hecho de que Tokyo sea el primer destino de Lufthansa con un avión ya mítico.

Y ahora una adivinanza. Tratad de averiguar como he conseguido la foto anterior. Os doy un par de opciones, de las cuales sólo una es correcta:

  1. La he tomado yo mismo desde la terraza de Narita. Me he acercado al aeropuerto a las 7:30 de la manana (hora prevista de aterrizaje), cogiendo el primer tren y llegando de milagro (el aeropuerto esta a 3h de casa), ya que el vuelo se ha retrasado 10 minutos.
  2. Me la ha dado el CEO de lufthansa junto con más material corporativo durante la rueda de prensa posterior en un hotel de lujo del centro de Tokyo. Para ello me he hecho pasar por periodista, poniendome el traje y todo.

La solución en un par de días.

Actualización: La respuesta correcta es la segunda. El caso es que acercarse al aeropuerto a esas horas desde donde yo vivo es imposible. Así que contacté de antemano con el personal de Lufthansa y fui a la rueda de prensa representando a Aviación Comercial. Nos dieron, aparte de un CD con varias fotos, un libro del A380 y una toalla de playa con el morro del avión en la misma.