Entradas escritas en octubre de 2009 ↓

Simulador de terremotos

La semana pasada Kentarō, el amigo japonés de Marta, decidió llevarnos a conocer más de cerca una de las cosas más características de Japón: los terremotos. Aunque todas las semanas ocurren varias decenas de terremotos a lo largo de Japón, en el año que llevo apenas he sentido tres o cuatro flojitos, y el moderado tirando a fuerte que ocurrió este verano pilló justo cuando estaba de vacaciones por el sudeste asiático, así que como ya andaba con ganas de sentir emociones fuertes me pareció un buen plan ir a probar un simulador de terremotos.

El lugar se llama Life Safety Learning Center, y aunque hay como tres o cuatro delegaciones en la zona metropolitana de Tokyo, fuimos al mejor de ellos que se encuentra cerca de la estación de la JR Kinshichō. Es el mejor porque en él se pueden simular mejores y más fuertes terremotos, tiene zona de tifones e incluso un cine en 3D con vibrador integrado en el asiento.

Primero nos llevaron al cine, y nos pusieron una película muy estilo años 70 en la cual un terremoto de magnitud 7 en la escala japonesa JMA (que va de 0 a 7) ocurre en Tokyo durante plena hora punta. El cine muy completo, con sistema de reproducción en 3D, pinganillo para traducción simultánea, y asientos que vibran al ritmo de las imágenes. Te dá una idea de lo que podría pasar y qué se debe hacer en esos casos (y las consecuencias si no se hacen: casas ardiendo por no apagar el gas, ambulancias atascadas por llevarte las llaves del coche, personas aplastadas por no buscar refugio, etc. Un poco trágico, pero lo solucionan poniendo al final la feliz imagen de un reencuentro en un campo de refugiados.

Luego nos separan en grupos y a cada uno se lo llevan a hacer un circuito para las diferentes actividades. En nuestro caso el terremoto sería al final. Mientras tanto, nos meten en un simulador de tifones con agua por todas partes y vientos de hasta 100km/h, un circuito laberíntico dentro de un edificio lleno de humo, y nos explican cómo usar extintores para apagar un pequeño incendio en nuestra casa. Aquí van los tres vídeos:

Al final, el simulador de terremotos. Como a lo largo de todo el proceso, te dan indicaciones claras de qué hacer y cómo deberías estar preparado para reducir los daños. Por ejemplo, en el caso de los terremotos es muy importante sujetar los muebles grandes y pesados con dispositivos especiales para que no vuelquen y se te caigan encima. Estas indicaciones son en japonés, así que si queréis aprender más os vale ir con alguien que entienda bien el idioma (yo no me incluyo en ese tipo de gente). Por si acaso también había indicaciones con un personaje bastante conocido en Europa: ¿qué haría Shin Chan en caso de terremoto?, la verdad es que sabiendo como es ese niño a saber cómo reaccionaría.

Y lo mejor llegó. Por fin un terremoto en condiciones. Magnitud 7 en la escala japonesa, que más o menos se corresponde con uno de grado Ritcher 7.5 o más. Fue corto, pero los segundos se hicieron eternos. Todo se movía como si un gigante agitase la habitación para ver qué había dentro.  Muebles cayéndose. La mesa en la que nos refugiamos no aguantaba y a pesar de que estábamos agarrados a las patas nos zarandeaba de un lado para otro. Y mientras tanto risas de fondo de los espectadores. Supongo que no se reirían tanto si ocurre uno de verdad.

Nos pusieron un programa genérico de terremoto de magnitud 7 pero también tenían otros programas de situaciones reales, como el terremoto de Kobe de 1995 de Niigata del 2004.

En definitiva, un lugar interesante al que ir el último día de visita en Japón, ya que si vas el primero te quita el encanto y la emoción de esperar un terremoto en cualquier momento.

Extra: Simulador portátil de terremotos.